Add parallel Print Page Options

¡Quién me diera una posada de caminantes en medio del desierto, para abandonar a mi pueblo e irme de ellos! Porque todos ellos son unos adúlteros, una asamblea de traidores. Dispusieron su lengua como arco; se hicieron fuertes en la tierra para el engaño, no para la fidelidad.

“Procedieron de mal en mal y no me han conocido, dice el SEÑOR. ¡Cuídese cada uno de su prójimo! En ningún hermano tenga confianza; todo hermano suplanta, y todo prójimo anda calumniando.

Read full chapter